domingo, diciembre 02, 2007

UNA AMISTAD ...¿PUEDE VOLVER A EMPEZAR?


Imagina que durante tu infancia tienes una amiga especial, una chica con la que compartes tus juegos y travesuras...pero resulta que un día una le quita un juguete a la otra, la otra se venga y le obliga a que le traiga uno mejor y se enfandan...es la madre de una de ellas la que tiene que intervenir para intentar arreglar la situación...pero se soluciona...al fin y al cabo son dos pequeñas, ya sabes lo que dicen son "cosas de niños".

El tiempo pasa, tras distanciamientos propios de la edad esas dos chicas ahora adolescentes se vuelven a encontrar en su vida, hacen muchas cosas juntas, desde un programa de radio, un diario a medias, tienen profesores en común y se ayudan mutuamente a estudiar, se van de campamento juntas, de compras, comparten sus ilusiones y sus miedos de futuro. Sin embargo un día una de ellas mete la pata traicionando a la otra, y por un tío al que no conoce y que para ella no significa nada, he ahí que a la otra chica le duela tanto, "para tí no era nada y yo le quería"...la otra tan avergonzada a día de hoy no quiere ni recordar aquel suceso, sabe que hizo muy mal que a ella no le hubiera gustado que la hicieran eso y no entiende porque hizo a su mejor amiga lo que jamás le hubiera gustado que le hicieran a ella, se siente despreciable, pequeña, siente que perder a su amiga es merecido. Desde entonces no se han vuelto a hablar, y sólo saben de la otra por lo que pueden contarles amigos en común o familiares de ambas.

Seguro que cualquier persona tuvo a alguien especial en su vida, y que por enfados tontos, circusntancias de la vida, desgana o puede que miedo a dar el primer paso nunca volvió a ver o hablarla.

Más de una vez pensé en tí, guardo en la caja de madera de cosas especiales de mi escritorio aquellas normas que escribimos para ser mejor en la vida: "no juzgar a nadie por la primera impresión", "ser alegre, cordial y simpática" y la mejor esa que decía "hidratarse la piel todos los días", debemos ser guapas por dentro y por fuera. Conservo también el cuaderno de viaje que me regalaste, hace poco se lo releí a una persona que sin conocerte de nada intuyó que eras muy especial, y ahí, aunque me duela me dí cuenta de que te echaba de menos, de que me gustabas, de que llenabas mi vida con un montón de cosas buenas...

Hoy sonó el teléfono, me sentí como aquella llamada que me hiciste días antes de la selectividad, temblé de miedo...tu voz suave y dulce me tranquilizó, entonces recordé tu olor, eres una de esas persoans que huele bien sin necesidad de echarse ningún perfume...entonces me dí cuenta que llevamos cinco años haciendo el tonto, que al menos nos debemos un abrazo y un café.

Mr. Postman traeme pronto las nuevas que espero, cartas como las de antes, como los diarios o las cintas que nos grababamos...es tiempo de darnos una oportunidad delante de un café con leche.

4 comentarios:

caqfss dijo...

Me ha conmovido mucho tu entrada Meli. No soy de dar consejos, por lo que no te lo voy a dar.

Pero imaginate, ( sólo imaginate ok?) que te enteras de que esa amiga, tiene una enfermedad terminal. ¿ No dejarías de lado todo lo sucedido en el pasado? ¿ No irías a verla o la llamarías?¿ Y no te dolería luego al final el tiempo desaprovechado en ese estupido silencio de dos adolescentes?

Echaba de menos entradas nuevas en tu blog, asi que voy a ponerme las botas de arriba a abajo.

Un abrazote.

Albert. dijo...

Me ha encantado este post, por lo que escribe que yo creo que todos tenemos alguien así en nuestras vidas que añoramos y que por miedo dejamos pasar y perder. Y un día...un día ha de regresar...:)
A mi me ha venido genial leerlo y pensar sobre "algo" que tiene mucho que ver y parece que últimamente escribas cosas que me ayudan sin saber. Y con ese dibujo que recuerdo puse en mi web también :) Y en el MSN como un abrazo a Sofia. Que recuerding :)
Espero que no te importe que lo copie enlazado en el mio que me ha gustado y servido. Y respecto a ti por escribirlo, me recuerda a una persona tuya, como si lo escribieras respecto de alguien que conocistes y que recuerdo algo que pasó y lo rompió todo. Y un nombre tiene esa persona. ;-)
Un bissoussss!!!!:)

ETDN dijo...

No sé. A mi me pasó algo así con una amiga. Mi mejor amiga de la adolescencia; con ella viví todas mis "primeras veces": novios, música, trabajo, etc. De pronto, ella se distanció. Aún sigo sin comprender muy bien las razones. No pasó nada, yo no le hice nada, ella tampoco a mí.

Han pasado siete años y me sigo acordando mucho de ella. A veces fantaseo con la idea de llamarla, pero luego me digo: ¿para qué?. Si se alejó sin dar explicaciones y no se ha puesto nunca en contacto conmigo ni preguntado por mí a amigas comunes, ¿para qué voy a remover yo nada?. Quizá sea mejor dejar las cosas como están y que yo me quede con ese recuerdo adolescente de lo que compartimos. Creo que no soportaría quedar con ella y descubrir que no me gusta la persona que es ahora. Prefiero recordarla tal y como la quise.

Perdona por el rollo, pero tu post me ha traído muchos recuerdos y yo también me he preguntado esas cosas miles de veces...

Y ya que Pablo Moro nos ha unido de alguna manera, pues me ha parecido interesante comentar.

bss

ETDN

Yo dijo...

Dí que sí. Queda con ella. Y tómate no uno, sino todos los cafés que hagan falta para poneros al día de todo.

Entiendo lo que dice arriba ETDN. Pero mira, a mi me pasó con K. Nos conocíamos desde pequeñas. Nuestras madres se conocían de jóvenes. Teníamos una casita de campo en la misma urbanización y, con los años, salíamos juntas en la misma minipandilla (eramos 3 o 4). Cuando llegamos al instituto nos distanciamos. Sin ningún motivo, en realidad. De estas veces que cada una va para un lado, coincidió que también vendió su casa del campo... No sé, dejamos de vernos.

Hará cosa de dos años o así, una amiga común del campo, me dijo que la había encontrado en un foro de yorkis y me dio por buscar su nombre en google (gracias a Dios tiene un nombre muy poco común). Y di con la página de la inmobiliaria de la madre. Dudé un rato. No sabía si enviarle un mail rellenando el formulario de contacto. No sabía cómo empezar. Hacía muchos años que no sabía nada de ella. Que no nos veíamos... No sabía si se acordaría de mí... Finalmente me decidí y escribí algo así como:

"Hola, soy Yo, la del campo, no sé si te acuerdas de mí. Rosa me dijo que te encontró en un foro y me puse a buscar a ver si te encontraba. Sólo quería saludarte y ver si podíamos quedar algún día de estos, que hace mucho que no nos vemos y me haría ilusión".

La respuesta fue inmediata. Al principio todas nuestras conversaciones eran en plan "¿te acuerdas cuando...? ¿sabes que fulanit@ tal...?". Normal, después del tiempo que había pasado no teníamos mucho en común. Nos habíamos perdido muchas cosas la una de la otra. Pero mira, hasta ahora. Ahora raro es el día que no nos vemos. Y siempre está ahí cada vez que la necesito. Y yo intento hacer lo mismo.

Así que (y perdona el tocho), desde mi experiencia positiva, te animo a que lo intentes. No tienes nada que perder. Y sí mucho que ganar. Un besito y gracias por tus ánimos ;)